Heliodoro Castillo, Guerrero.- Agencia de Noticias Guerrero (ANG).-Los habitantes de las comunidades de Tejamanil, Pueblo Viejo y Las Juntas, en el municipio de Heliodoro Castillo, se han unido para enfrentar las secuelas del huracán John que dejó caminos destruidos y la infraestructura básica afectada. Todos los días, vecinos de estas localidades salen a trabajar de manera voluntaria para abrir caminos, levantar postes de luz y remover la tierra que ha dejado incomunicadas a sus comunidades.
A pesar de su esfuerzo incesante, los recursos son insuficientes. Los habitantes carecen de maquinaria y de las herramientas necesarias para restablecer completamente las vías de comunicación. La situación ha llegado al punto en que solicitan la intervención urgente del gobierno municipal, estatal y federal, pues la magnitud de los daños requiere un apoyo técnico y material que sobrepasa sus capacidades.
Además de la problemática de infraestructura, las comunidades se enfrentan a una situación humanitaria crítica. La falta de acceso a los caminos dificulta la llegada de alimentos, medicamentos y otros insumos básicos. Muchas familias ya han comenzado a sufrir por la falta de comida y atención médica, especialmente los más vulnerables: niños, ancianos y personas con problemas de salud.
“Nos hemos quedado incomunicados. Hacemos lo que podemos con nuestras manos, pero necesitamos maquinaria y ayuda externa para recuperar nuestros caminos”, comenta uno de los vecinos de Pueblo Viejo, quien ha estado colaborando en las labores de limpieza y recuperación desde el paso del huracán.
El llamado de auxilio es claro. Los habitantes de Tejamanil, Pueblo Viejo y Las Juntas piden que las autoridades se hagan presentes con maquinaria y ayuda humanitaria para restablecer la normalidad en estas comunidades golpeadas por el fenómeno natural. Su esfuerzo diario es un ejemplo de la fortaleza y la unión de los pueblos de la sierra de Guerrero, pero también evidencia la necesidad urgente de apoyo institucional para superar esta crisis. ANG.
