

Chilpancingo, Gro., 9 de octubre de 2024.- Agencia de Noticias Guerrero (ANG).-Al igual que hace once años, un grupo de habitantes de Tixtla realizó un ritual pagano-religioso en la cueva de Amatitlán, ubicada cerca de un resumidero utilizado para desfogar el agua de La Laguna, la cual ha inundado cientos de viviendas. Según los participantes, el propósito del rito es garantizar que los trabajos de desfogue continúen sin interrupciones, permitiendo que las familias afectadas puedan regresar a sus hogares lo más pronto posible.
El ritual, encabezado por el comité de damnificados y varios ciudadanos, incluyó ofrendas a las fuerzas sobrenaturales, conocidas como “el amigo” o las deidades elementales de la naturaleza. Las ofrendas consistieron en tamales, mole verde, velas, cigarros y mezcal, elementos tradicionales en este tipo de ceremonias, que buscan el favor de los espíritus de la tierra y el agua para facilitar el drenaje de La Laguna.
Un estudiante de medicina alternativa, quien prefirió permanecer en el anonimato, explicó que este tipo de rituales no están necesariamente relacionados con “el amigo”, como muchos creen, sino con la Pachamama (la madre tierra) y los guardianes elementales. Según el estudiante, estos rituales son una forma de pedir permiso a las fuerzas naturales para intervenir en su territorio y asegurar que los trabajos se desarrollen de manera eficiente.
“Todo tiene su forma”, comentó el joven. “Para que los trabajos de desfogue sean efectivos, es importante pedir permiso a la tierra y a los guardianes de las cuevas y el agua. Estas entidades responden cuando se les ofrenda algo con sinceridad.”
Aunque estas prácticas suelen ser malinterpretadas.ANG.